Las tarjetas revolving son un tipo de tarjeta de crédito que ha ganado popularidad en los últimos años debido a su flexibilidad para financiar compras. Sin embargo, entender cómo funcionan es esencial para evitar sorpresas desagradables. En este artículo, exploraremos qué son las tarjetas revolving, cómo funcionan y cuáles son sus ventajas y desventajas.
¿Qué son las tarjetas revolving?
Las tarjetas revolving son una modalidad de tarjeta de crédito que permite al usuario disponer de una línea de crédito renovable. Esto significa que el titular puede usar y devolver el dinero prestado tantas veces como quiera, siempre y cuando no supere el límite de crédito asignado. A diferencia de las tarjetas de crédito tradicionales, donde se espera que el saldo se pague en su totalidad al final del mes, las tarjetas revolving permiten pagar una cantidad fija o un porcentaje del saldo pendiente.
¿Cómo funcionan las tarjetas revolving?
El funcionamiento de las tarjetas revolving es relativamente simple. Cuando se realiza una compra con este tipo de tarjeta, el importe se suma al saldo total adeudado. Al final del mes, el usuario puede elegir pagar una cantidad mínima establecida por el banco o un porcentaje del saldo total. El resto del saldo se aplaza y genera intereses, que se acumulan al saldo pendiente.

El ciclo de crédito en las tarjetas revolving es continuo. Cada vez que se realiza un pago, se libera una parte del crédito disponible, que puede ser reutilizado para nuevas compras. Este sistema permite una gran flexibilidad, pero también puede llevar a un crecimiento del saldo pendiente si no se controla adecuadamente.
Intereses y comisiones
Uno de los aspectos más importantes de las tarjetas revolving son los intereses y comisiones que se aplican. Por lo general, las tasas de interés de estas tarjetas son más altas que las de las tarjetas de crédito estándar. Además, algunas entidades pueden cobrar comisiones por mantenimiento o por el uso del crédito disponible.
Ventajas de estas tarjetas
- Flexibilidad: Permiten adaptar el pago mensual a la situación financiera del usuario.
- Disponibilidad de crédito: El crédito se renueva automáticamente a medida que se realizan pagos.
- Facilidad de uso: Funcionan como cualquier tarjeta de crédito regular, lo que las hace convenientes para compras diarias.
Desventajas de usarlas
- Altas tasas de interés: Pueden llevar a un endeudamiento significativo si no se gestiona correctamente.
- Comisiones adicionales: Algunos bancos cobran comisiones adicionales que pueden aumentar el costo total del crédito.
- Riesgo de sobreendeudamiento: La facilidad de acceso al crédito puede llevar a gastar más de lo que se puede pagar.
Las tarjetas revolving ofrecen una solución de crédito flexible para muchos usuarios, pero requieren un manejo cuidadoso para evitar problemas financieros. Con una comprensión clara de su funcionamiento y un control riguroso del gasto, pueden ser una herramienta útil para gestionar las finanzas personales.
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